Esta semana la revista francesa Point de Vue publica un artículo en el que analiza los gastos de las princesas europeas. Datos sorprendentes.
Letizia de España, la ahorradora
Pese a que Zarzuela no quiere dar ningún dato sobre la asignación de Felipe y Letizia, nuestra princesa es de lejos una de las más ahorradoras. El único dato que conocemos es que el Rey dispone al año de un sueldo de 8.434.000 de euros, que luego distribuye a su familia según sus propios criterios.
Pese a lo elevado de la cifra, hay que decir, que es cinco veces menos que los 60 millones de euros de la casa real británica. Los Príncipes viven la “La Casa del Príncipe”, una residencia que constó 4.237.135 de euros, y donde los Príncipes disponen del servicio “estrictamente necesario”.
Tanto Letizia como Felipe tienen vehículos propios para sus desplazamientos privados, pero no se han revelado nunca las marcas, para evitar cualquier tipo de publicidad. En cuanto al vestuario de nuestra Princesa, esta se decanta por marcas de lujo como Gucci, Chanel, Dior o Felipe Varela, pero también por marcas más económicas como Zara, Massimo Dutti o Mango.
Victoria de Suecia, la derrochadora
Recientemente el rey Carl XVI Gustaf pidió al Ministerio de Finanzas una asignación de 6.165.000 euros anuales para Victoria, heredera del trono y su marido Daniel. Una suma que debe cubrir los gastos que conlleva tener una secretaria, una doncella, dos guardaespaldas, un Volvo, un Lexus, tiaras, joyas varias… De hecho, hay quién afirma que su fortuna ronda los 2.233.000 de euros. “Victoria adora viajar. Las pistas nevadas de Italia, las playas de Tailandia, se escapa en cuanto puede”, afirma Jenny Alexandersson, de Aftonbladet.
En cuanto a su vestuario, la joven se decanta por diseñadores suecos como Pär Engsheden (encargado de su vestido de novia) y Lars Wallin. Pero también se apunta también a grandes diseñadores internacionales como Armani y Eli Saab. A su favor podemos decir que la joven también apuesta por marcas low cost como HM, cuyo vicepresidente es amigo suyo.
Mary de Dinamarca, a todo tren
La princesa Mary es una de las princesas que más disfruta gastando. De 2,43 millones de euros con los que cuentan su marido y ella, un 10 por ciento está exclusivamente dedicado a ella, es decir, 243.000 euros. Teniendo en cuenta que el estado danés les cede la casa, muebles y paga el mantenimiento del palacio de Frederik VIII, este dinero sirve para pagar a las dos doncellas que ejercen de secretarias y a las once personas a su cargo entre las que se encuentran una cocinera, una enfermera, etc.
Y no hay que olvidarse de las cuatro niñeras que tiene Mary, una para cada uno de sus hijos. En cuanto a su vestuario, las malas lenguas afirman que la australiana se gasta a diario 2500 euros en ropas: Prada, Hermès, Gucci, Hugo Boss, Chanel, Diane von Furstenberg, sin olvidarse de diseñadores daneses como Malene Birger o Jesper Hovring.
Máxima de Holanda, en su justa medida
Pese a que los Príncipes de Holanda cuenta con 624.000 euros al año, Máxima ha sabido sacarle el mayor partido a su dinero. Prendas de Edouard Vermeulen, Valentino, diademas de lujo, secretaria, chofer, siete doncellas puestas a su disposición, cocineros, jardineros, niñera, etc ., incluso los de Orange pudieron comprarse una casa en la Patagonia por 3,5 millones de dólares. En cuanto a su residencia, situada cerca de La Haya, cuenta con una casa de 600 metros cuadrados con terraza, biblioteca, piscina interior y jacuzzi, estanques, un bosque, etc.
Matilde de Bélgica, la discreta
Representante de UNICEF y ONUSIDA, Matilde de Bélgica tiene a su disposición una dotación de 788.000 euros, con la que ella y su marido viven tranquilamente en Laeken. Matilde lleva una vida tranquila; se ocupa de acompañar a sus hijos Elisabeth, Gabriel y Emmanuel al colegio y disfruta paseando por Bruselas con su pequeña Eleonor.
En verano, la familia procura no derrochar grandes cantidades de dinero y aprovecha para ir Loppem o a la isla de Yeu en Francia, donde viajan en ferry con su Mercedes rojo. En cuanto al sus prendas de vestir, Matilde es siempre fiel al diseñador oficial de la casa real, Edouard Vermeulen, director de la firma Natan.
Mette-Marit de Noruega, una más
La asignación de la casa real noruega es bastante más baja que la de los príncipes suecos, puesto que Mette Marit y su marido cuentan al año con un presupuesto de 830.000 euros. Gracias a él Mette Marit puede pagar los gastos de Skaugum Estate, la casa donde reside, al sud oeste de Oslo, los guardaespaldas, la secretaria, el chofer, etc.