19 de noviembre de 2011

Los reyes de Bután, de viaje por Japón, visitaron a sobrevivientes del maremoto de Fukushima


El 18 de noviembre los reyes Jigme Khesar Namgyal y la reina Jetsun de Bután fueron a la Prefectura de Fukushima donde visitaron a los sobrevivientes del  tsunami del 11 de marzo 2011 en una escuela de Soma. Fueron recibidos por el príncipe heredero Naruhito -en funciones oficiales, representando a su padre- y por la emperatriz Michiko.





El Rey Jigme Khesar y la reina Jetsun visitaron el santuario del Templo del Pabellón de Oro de Japón -llamado Kinkaku-ji- el cual corresponde al reconstruido pabellón “Shari-den” del ancestral templo del budismo Zen Hokusan-Rokuon-ji en cuya pagoda los fieles aseguran que se guardan las cenizas deBuda Shakyamuni (Sakiamuni).

El mismo día los monarcas visitaron una escuela en Fukushima con niños sobrevivientes del maremoto del 11 de marzo 2011, informó TV Asahi.

El Templo del Pabellón de Oro se llama así porque está recubierto con “paneles de oro”. En su interior, según el budismo Zen “Hokusan-Rokuon-ji”, en su pagoda se guardan las cenizas del Buda Shakyamuni (Sakiamuni).

El rey y la reina viajaron a la región noroeste de la ciudad de Kioto donde se encuentra el santuario, que se considera Patrimonio de la Humanidad. Fue recibido por el sacerdote budista y mientras llovía pasearon con paraguas frente al Estanque del lago Espejo para disfrutar la vista de las hojas de otoño, informó el medio Yomiuri.

La pareja real también visitó el Museo de Artesanía Tradicional y en la noche fueron huéspedes del Estado de Kyoto.

El 18 de noviembre también fueron a la Prefectura de Fukushima donde visitaron a los sobrevivientes del tsunami del 11 de marzo 2011 en una escuela de Soma.

"Muchas personas siguen viviendo con problemas después de que sus casas fueron arrasadas", dijo a la pareja real un niño de 11 años de edad llamado Kasumi Ir. Pero (su visita) nos da aliento y esperanza", explicó, según TV Asahi.

El rey dijo a los estudiantes que viajó a Japón para llevar "aliento y amor" y explicó que “todo el mundo tiene un ‘dragón’ en la personalidad, que se hace más grande y más fuerte a medida que se envejece y se acumula con la experiencia”.

Por su parte, la reina Jetsun prometió regresar a la escuela la próxima vez que visite Japón.

Los reyes de Bután se reunieron en el mismo día con el príncipe Naruhito y la emperatriz Michiko en la casa de invitados de Akasaka en Tokio.



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