4 de febrero de 2012

Catalina de Cambridge adopta un perro y empieza su agenda oficial sin Guillermo

Con su esposo destinado en las islas Malvinas, Catalina inicia su trabajo oficial en solitario. Le acompañará un perro recientemente adoptado por ella y Guillermo.


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La duquesa de Cambridge, Catalina, llevará a cabo la próxima semana la primera actividad oficial en solitario desde su boda con Guillermo en abril pasado, anunció el palacio esta semana, mientras su marido inicia una misión de seis semanas en las islas Malvinas.

La duquesa de Cambridge visitará el miércoles la National Portrait Gallery coincidiendo con la inauguración de una exposición póstuma de retratos del artista Lucian Freud, fallecido en julio de 2011.

Catalina, licenciada en Historia del Arte, ocupa desde enero un cargo de honor en este importante museo público británico que contiene la mayor colección de retratos del mundo.

El 14 de febrero, día de los enamorados, la duquesa viajará a Liverpool (noroeste de Inglaterra) en apoyo a otra de las organizaciones sin ánimo de lucro en las que se ha involucrado personalmente, Action on Addiction, precisó la secretaría del príncipe Carlos y de sus hijos.

Catalina, de 30 años, visitará ese día un bar sin alcohol llevado por la asociación y el hospital infantil Alder Hey, donde se reunirá con empleados, pacientes y padres en la unidad de oncología.

El anuncio de estas primeras obligaciones regias coincide con la llegada de su esposo, el príncipe Guillermo, a las islas Malvinas cuya soberanía reivindica Argentina, para una misión de seis semanas en el marco de su trabajo de piloto de búsqueda y rescate.


Además de trabajar, durante la ausencia de Guillermo, Catalina podrá ocuparse del perro, un cachorro de cocker spaniel, que la pareja adoptó recientemente.

El periódico conservador The Daily Telegraph revela que se trata de la cría de un perro que pertenece a Carole Middleton, madre de Catalina.

La mascota vivirá con la pareja en su actual residencia en la isla de Anglesey (norte de Gales), donde el príncipe Guillermo lleva a cabo su entrenamiento como copiloto de helicópteros de rescate en una base militar.

Con la llegada el cachorro, la popular pareja, que se casó en abril de 2011 ante los ojos de medio mundo, se suma a la afición centenaria de la familia real británica por los perros. La reina, Isabel II, posee varios ejemplares de la raza corgi, que se desplazan con ella cada vez que se traslada a una de sus numerosas residencias.






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