El minúsculo principado de Liechtenstein atraviesa momentos de conmoción ante un proyecto de referendo para derogar el poder de veto del príncipe, que a su vez amenaza con renunciar a sus funciones si la idea prospera.
El minúsculo principado de Liechtenstein atraviesa momentos de conmoción ante un proyecto de referendo para derogar el poder de veto del príncipe, que a su vez amenaza con renunciar a sus funciones si la idea prospera.
| Comparte este artículo Seguir a @CoronasReales Noticias relacionadas » El parlamento de Liechtenstein quiere quitar poderes a la monarquía | El minúsculo principado de Liechtenstein atraviesa momentos de conmoción ante un proyecto de referendo para derogar el poder de veto del príncipe, que a su vez amenaza con renunciar a sus funciones si la idea prospera. Con unos 36.000 habitantes y una superficie de 160,5 km2, el bucólico Liechtenstein, situado entre Suiza y Austria, es uno de los países más ricos del mundo, según la clasificación mundial. Autónomo desde el fin del Santo Imperio Romano Germánico en 1806, la pequeña parcela de tierra es dirigida por la dinastía de los Liechtenstein. Desde lo alto de su castillo en la pequeña capital, Vaduz, el príncipe Alois von und zu Liechtenstein ha visto su poder corroído en los últimos meses por un comité de ciudadanos reunidos con la consigna "Porque tu voz también cuenta". El objetivo del grupo es lanzar un referendo sobre la posibilidad de derogar al derecho de veto del príncipe, que puede con ese mecanismo bloquear toda ley o iniciativa popular. La simple amenaza al uso del veto puede hacer derrumbarse todo proyecto de reforma, como la legalización del aborto. El príncipe Alois, de 43 años, casado y padre de 4 niños, ya había indicado su oposición a la iniciativa popular, y adelantó que le opondrá su veto, impidiendo que entre en vigor. Un referendo de septiembre de 2011 terminó con el rechazo a una amplia reforma. "El referendo estaba condenado al fracaso" por la amenaza del príncipe de emplear su derecho de veto para torpedear la votación, dijo a la AFP Sigvard Wohlwend, portavoz del movimiento ciudadano. En una contradicción del sistema, el príncipe puede imponer su veto en caso de que tenga éxito un referendo para derogar... su derecho de veto. Aunque según expertos, lo más probable es que abdique y decida retirarse. |
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