El príncipe, segundo en la sucesión al Trono Británico, se muestra asombrado de que su abuela no haya "flaqueado" después de casi 60 años como Reina, en una entrevista publicada hoy en el diario Daily Mail. Fotos.
Guillermo, hijo del príncipe Carlos y segundo en la línea de sucesión al trono británico, dice que si a Isabel II le planteas un reto, "ella siempre responde al desafío".
"Lo lleva haciendo 60 años, es increíble", comenta el orgulloso nieto que describe su relación con la soberana como "cada vez más solida" en la entrevista que el periodista Robert Hardman le hizo para su libro "Our Queen", del que parte de su contenido adelanta el Daily Mail.
El príncipe Guillermo, cuya boda con Catalina Middleton en abril fue un acontecimiento mundial, cuenta cómo para él, Isabel II es primero su abuela y luego la Reina, pero revela que al haber sido un adolescente "tímido" le era difícil hablar con ella de asuntos importantes.
"Según voy creciendo, ella se va convirtiendo en alguien cada vez más importante, todo resulta más fácil y obviamente con la boda fue de una ayuda enorme", comenta el hijo mayor de Diana de Gales y piloto de helicópteros de las Fuerzas Aéreas británicas.
En la entrevista publicada hoy, el príncipe Guillermo, de 29 años, relata que la Reina le envió una carta de agradecimiento tras la visita que realizó a las víctimas de las inundaciones en Australia y el terremoto de Nueva Zelanda a principios de año.
"Es extraño, pero cuando recibes una carta de ella o un pequeño elogio vale muchísimo, bastante más que cualquiera diciéndote que lo has hecho bien", confiesa el príncipe.
"Según voy creciendo, ella se va convirtiendo en alguien cada vez más importante, todo resulta más fácil y obviamente con la boda fue de una ayuda enorme", comenta el hijo mayor de Diana de Gales y piloto de helicópteros de las Fuerzas Aéreas británicas.
En la entrevista publicada hoy, el príncipe Guillermo, de 29 años, relata que la Reina le envió una carta de agradecimiento tras la visita que realizó a las víctimas de las inundaciones en Australia y el terremoto de Nueva Zelanda a principios de año.
"Es extraño, pero cuando recibes una carta de ella o un pequeño elogio vale muchísimo, bastante más que cualquiera diciéndote que lo has hecho bien", confiesa el príncipe.
