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El príncipe Enrique, nieto de la reina de Inglaterra, confesó que él aún no ha podido encontrar el amor, pero piensa que en su búsqueda de esposa será más “trabajo” y obligación, en lugar de romance.
Enrique, realizó una gira de 10 días por América Latina, donde estuvó representando a la reina Isabel II, abrió la celebración internacional del 60 aniversario de su reinado y habló sobre lo difícil que es la vida de los miembros de la familia real.
Admitió que él y su hermano Guillermo a menudo sólo quieren ser “gente común”, pero comprenden la posición que ocupan.
El único largo romance que tuvó el príncipe fue la relación de cinco años con su ex novia, Chelsy Davy, que terminó en 2009.
“Miren, ya tengo 27 años. Yo no estoy buscando a alguien capaz de interpretar este papel (el papel de esposa), sino a la que esté dispuesta a asumir todo esto (las obligaciones)”, dijo el príncipe.
Durante la gira Enrique también recaudó dinero para su organización de benificiencia “Sentebale”, de ayuda a niños huérfanos africanos, fundada en 2006 junto con el príncipe de Lesotho, Seeiso.
“Nosotros ( también mi hermano) poco a poco nos damos cuenta de que nuestro nombre puede realmente ayudar a cambiar algo. Como ustedes saben ‘Sentebale’ significa ‘no olvidar’,quiere decir que no hay que olvidarse de los niños, de sus madres, nosotros y el príncipe Seeiso perdimos a nuestras madres a una edad muy temprana”, dijo Enrique .
Admitió que su madre, la fallecida princesa Diana, quien activamente participaba en actos de caridad, sigue siendo su inspiración en las cosas que él está haciendo ahora. Enrique señalo que la comunicación con sus padres desde temprana edad le ayudó a comprender que hay que ayudar a aquellos a los que uno puede ayudar.
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