El antiguo monarca, que sigue siendo una figura reverenciada en Camboya, fue despedido por su hijo, el rey Norodom Sihamoni, el primer ministro Hun Sen y otros altos funcionarios gubernamentales en el aeropuerto de Phnom Penh.
Sihanouk ha sufrido una serie de enfermedades, incluyendo cáncer, diabetes e hipertensión, y ha recibido la mayor parte de su tratamiento médico en China, a pesar de haber estado de vuelta en Phnom Penh, capital camboyana, desde principios de abril.
Melancólico, el anciano monarca a veces utiliza su página web para comunicarse con los súbditos, que lo reverencian como el "Padre del Pueblo". En su mensaje más reciente, del pasado 30 de julio, se disculpó por estar demasiado cansado para recibir a los visitantes. "La verdad es que ... me menudo me quedo dormido", escribió en una carta manuscrita publicada en línea. "Paso la mayor parte de mi tiempo en mi habitación".
En 2009 en un arranque de sensibilidad y melancolía, confesó que ya ha vivido mucho tiempo y que desea morir tan pronto como sea posible: "La longevidad ejerce sobre mí un peso insoportable", dijo.
El rey de Camboya, conocido como Deva Raja (rey dios), ha sido rehén de ese destino, y ha pagado un alto precio. De los 14 hijos que tuvo con varias esposas y concubinas, sólo viven ocho. El resto cayeron asesinados en las oleadas de violencia que sacudieron al país.
Sihanouk ha sufrido una serie de enfermedades, incluyendo cáncer, diabetes e hipertensión, y ha recibido la mayor parte de su tratamiento médico en China, a pesar de haber estado de vuelta en Phnom Penh, capital camboyana, desde principios de abril.
"Esta vez, quiere chequear su estado de salud para mantenerse bien y vivir mucho tiempo entre su pueblo", dijo el príncipe Sisowath Sirirath, vicepresidente segundo del partido monárquico Funcinpec, a los periodistas. Sihanouk, que viajaba con su esposa, la reina Sisowath Monivong, apareció alegre y bien descansado mientras apretaba sus manos en un saludo tradicional de despedida antes de abordar su avión.
En 2009 en un arranque de sensibilidad y melancolía, confesó que ya ha vivido mucho tiempo y que desea morir tan pronto como sea posible: "La longevidad ejerce sobre mí un peso insoportable", dijo.
Norodom Sihanuk se sentó en el trono milenario de Camboya cuando tenía 18 años. Recién salido de la adolescencia, Sihanuk se convirtió en Samdech (algo así como “padre reverenciado”) de todos los camboyanos.
Acostumbrado a la vida muelle de palacio, los franceses se ocuparon de darle una refinada educación en liceos de la capital del país y de la del vecino Vietnam, Saigón. Ya rey, sus estancias en Francia fueron prolongadas. Allí se formó como militar en las prestigiosas academias de Saumur y Saint-Cyr.
Desde entonces, sobrevivió a la ocupación japonesa, a los bombardeos estadounidenses, a los revolucionarios iluminados que mataron a un millón de compatriotas, a las más variadas intrigas y exilios.
Rey dios para sus súbditos, músico, poeta, bon vivant de la más rancia escuela francesa y único superviviente de una época, ha sido catalogado por el Libro de los Récords Guinness como la persona que más cargos públicos ostento en la historia: príncipe, rey, ministro, secretario, primer ministros, vicepresidente, presidente. Y ahora, "Rey Padre" y "Padre de la Nación Camboyana".
Este gran superviviente de un siglo calamitoso se prepara para decir adiós. “Mi vida entra en un periodo parecido al declinar del sol”, anunció. Por eso, en 2004, entristecido y debilidado por sus problemas de salud, decidió abdicar al Trono. El Consejo del Trono, encargado de elegir al rey de entre cientos de príncipes, siguió el consejo del rey-padre y elegió rey a su hijo menor, bailarín de ballet, Norodom Sihamoni.
En el crepúsculo de su vida, Norodom Sihanuk encomienda la paz de su alma a los monjes budistas, que cada día de su cumpleaños, en una solemne ceremonia, le rocían con agua purificada para que siga siendo “la luz en la que se cobija el pueblo”.