Los amigos la reina Isabel II no se atreven a hacerle preguntas acerca de sus sentimientos personales a causa del impenetrable muro de privacidad que 60 años de vida pública construyeron a su alrededor.
Este y otros datos, casi desconocidos, sobre la reina británica son revelados en una nueva biografía escrita por una periodista norteamericana..
Elizabeth the Queen, escrita por Sally Bedell Smith, ya es un éxito a ambos lados del Atlántico justo cuando Gran Bretaña se prepara para la conmemoración de Jubileo de Diamante de la monarca.
Bedell Smith, escritora de Vanity Fair, ya escribió en el pasado prestigiosas biografías de personalidades como la princesa Diana, John y Jacqueline Kennedy, y el matrimonio de Bill y Hillary Clinton.
Bedell Smith recibió la aprobación tácita del Palacio de Buckingham para su último proyecto y habló con los asesores, cortesanos y familiares de la mujer que ella llama "la persona más pública y más privada en el mundo".
En el libro, Bedell Smith habla de los temores de la reina sobre el divorcio entre su hijo el príncipe Carlos y la fallecida princesa Diana y otros muchos dramas en su reinado.
El ex arzobispo de Canterbury, Lord Carey, dice en el libro que Isabel estaba preocupada de que su hijo mayor abandonara su lugar en la línea de sucesión a para casarse con Camilla Parker Bowles, al igual que lo hiciera su tío, el rey Eduardo VIII, quien renunció al trono en 1936 para casarse con su amante, Wallis Simpson.
El libro dice que hubo "tensiones" en el matrimonio de la reina con el príncipe Felipe después de que ella se negó a tomar su apellido, Mountbatten, después de su boda 1947 y el ascenso de Isabel al trono. Su familia y el gobierno insistieron en mantener el nombre de Windsor, pese a la furia de Felipe.
Pero Bedell Smith escribe que el príncipe Felipe ha sido siempre un devoto esposo: "Lo que más me llamó la atención fue lo mucho que están en sintonía", dijo la autora en una conferencia de prensa.
Establecida en Nueva York, la autora e historiadora americana asegura en su libro que la reina siempre ha tenido pocos amigos por vivir, desde su infancia, "en su propia burbuja pequeña y pequeño mundo" donde no hay demasiado sitio para la amistad.
"Se trata de un ser divertido que les da muy buenos consejos a pesar de que ellos son muy cuidadosos de no ser presuntuosos... Se interesa por las noticias familiares, pero hay como una pantalla. Ellos no osarían preguntarle por su intimidad o su vida personal. Ella guarda muchas cosas para sí misma", señaló la autora, que colabora con la revista Vanity Fair y fue reportera del New York Times.
El libro dice que hubo "tensiones" en el matrimonio de la reina con el príncipe Felipe después de que ella se negó a tomar su apellido, Mountbatten, después de su boda 1947 y el ascenso de Isabel al trono. Su familia y el gobierno insistieron en mantener el nombre de Windsor, pese a la furia de Felipe.
Pero Bedell Smith escribe que el príncipe Felipe ha sido siempre un devoto esposo: "Lo que más me llamó la atención fue lo mucho que están en sintonía", dijo la autora en una conferencia de prensa.
Establecida en Nueva York, la autora e historiadora americana asegura en su libro que la reina siempre ha tenido pocos amigos por vivir, desde su infancia, "en su propia burbuja pequeña y pequeño mundo" donde no hay demasiado sitio para la amistad.
"Se trata de un ser divertido que les da muy buenos consejos a pesar de que ellos son muy cuidadosos de no ser presuntuosos... Se interesa por las noticias familiares, pero hay como una pantalla. Ellos no osarían preguntarle por su intimidad o su vida personal. Ella guarda muchas cosas para sí misma", señaló la autora, que colabora con la revista Vanity Fair y fue reportera del New York Times.