La Fundación Diana Princesa de Gales fue creada en el año 1997, gracias a las donaciones públicas recibidas tras la muerte de la Princesa de Gales, y ahora se disolverá en el 2012 por haber llegado a una situación de crisis insostenible. Esta fundación nunca contó con el respaldo de la Familia Real Británica agravando así la mala situación económica.
A pesar de que los informes iniciales aseguraban que la Fundación Diana de Gales podría continuar realizando sus labores de caridad durante un tiempo indefinido, ahora uno de sus portavoces ha confirmado que su cierre será inminente durante el transcurso del próximo año.
"Nuestro objetivo es cerrarla el 31 de diciembre de 2012, pero hasta entonces seguiremos trabajando para garantizar que el dinero de nuestros socios se destina a proyectos sociales", declaró.
A raíz de la muerte de Lady Di, la Fundación recibió varias donaciones públicas que ascendieron a la cantidad de 30 millones de euros destinados a las ayudas humanitarias, símbolo del espíritu de la madre de Guillermo de Inglaterra. No exenta de polémicas, la organización se vio envuelta en un pletio contra Mint, tras demandarles por haber vendido platos y joyas inspirados en la Princesa de Gales.
La Fundación perdió la causa y fue obligada a pagar cinco millones y medio de euros. Y, por si esto fuera poco, Mint volvió a demandar a la organización por daños y perjucios, así que finalmente tuvo que desembolsar otros 21 millones de euros.
A raíz de la muerte de Lady Di, la Fundación recibió varias donaciones públicas que ascendieron a la cantidad de 30 millones de euros destinados a las ayudas humanitarias, símbolo del espíritu de la madre de Guillermo de Inglaterra. No exenta de polémicas, la organización se vio envuelta en un pletio contra Mint, tras demandarles por haber vendido platos y joyas inspirados en la Princesa de Gales.
La Fundación perdió la causa y fue obligada a pagar cinco millones y medio de euros. Y, por si esto fuera poco, Mint volvió a demandar a la organización por daños y perjucios, así que finalmente tuvo que desembolsar otros 21 millones de euros.
Desde entonces, la Fundación no ha levantado cabeza. el resultado no podría ser otro. Varios medios británicos aseguran que la Fundación se encuentra en situación de bancarrota.
